Las páginas blancas quedaron impresas
en el vaivén de mis fantasías,
los rumores de la noche
se llevaron las estrellas de mi cielo
y las golondrinas azules
perdidas en incesante vuelo
desgarraron mi corazón
se fueron para nunca más volver
Sólo quedan las huellas
de una frágil figura
en la tibia arena
en la tibia arena
No hay comentarios:
Publicar un comentario